Día de la ... ¿Suegra? !!

Estos días he estado leyendo sobre la vida de Rut en la Biblia. Hay un pequeño libro después de Números en el Antiguo Testamento que lleva su sombre: Rut.

Estaba pensando acerca del Día de la Madre y pensé en la suegra de Rut, Noemí. Rut se casó con uno de sus dos hijos. En aquellos tiempos una mujer literalmente dejaba su familia para hacer parte de otra. El marido de Noemí se muere, tiempo después sus dos hijos también. Ella se ve sola con sus dos nueras.

Noemí empieza su viaje de regreso a su gente. Dice a sus nueras que ya no tienen obligación con ella pues sus hijos están muertos. Ellas podrían ir a casa de sus padres y volver a sus familias. Las dos no la quieren dejar. Lloran y piden que puedan acompañarla. Ruth insiste tanto que una de las nueras decide regresar aún que entre lágrimas.

Rut, la segunda nuera, le dice estas palabras:

Rut 1:16

¹⁶ Rut respondió:

--No me ruegues que te deje

y me aparte de ti,

porque a dondequiera que tú vayas, iré yo,

y dondequiera que vivas, viviré.

Tu pueblo será mi pueblo

y tu Dios, mi Dios.

Con estas palabras Rut deja claro que no tiene la intención de abandonar su suegra. Ambas emprenden su viaje de regreso a Belen. Rut le sirve a Noemí y le quiere como una madre.

Rut se casa en la familia, como era la costumbre, con un buen hombre que provee para ambas con hartura.

Ahora me pongo a pensar, ¿qué tenía Noemí que sus nueras no querían dejarla? Es difícil ser una buena madre, y quizás aún mayor reto, ser buena suegra. Noemí era una mujer íntegra, de principios, que servía a Dios. ¿Has oído que personas que viven juntas acaban asemejándose entre sí? He oído que eso pasa con los hijos (aparte de la genética) pero aún con marido y mujer que no comparten genes. Yo creo que estar con otra persona nos cambia, hablamos como esta persona, imitamos inconscientemente. Yo creo que Noemí tenía rasgos que solo podían venir de Dios. Seguramente estaba tan cerca de Dios que las personas no sabían decir donde acababa Noemí y donde empezaba Dios. Eran una sola cosa. Cuando Rut dice a Noemí “tú Dios será mi Dios” quiere decir que en la vida de Noemí era obvio que Dios era importante y que hacía una diferencia en ella, tanto que Rut quería ser como ella.

Ya había leído esta historia pero con el día de la Madre que se acerca, empecé a pensar que Noemí es un buen ejemplo para que siga. Su amor y generosidad para con su familia es obvio por el amor que sus nueras le blindaban. Quiero estar cerca de Dios y que “el roce” me pueda cambiar y pueda ser más como Él, ser como Noemí.

FELIZ DIA DE LA ... MADRE ... O SUEGRA!