AMOR … esta semana pasada se celebró el día de San Valentín. Algunos escogemos celebrarlo y otros no. Me siento dividida. ¿Por qué “un” día dedicado al amor, cuando nuestro Señor nos ha dicho que amásemos los unos a los otros en todo el tiempo? La Biblia dice “el amigo ama en todo el tiempo” no solamente en un día designado. Por otro lado, me gusta tener un día para hacer algo “extra” especial para todos los que quiero.
Hoy por la mañana leía en el Facebook dos entradas de dos amigos diferentes de Brasil. Los dos mencionaron Madre Teresa. Cuando pienso en esta gran mujer, veo la personificación del amor. Un autor la cita:
“Si no puedes hacer grandes cosas, Madre Teresa solía decir, haz pequeñas cosas con gran amor. Si no puedes hacer estas cosas con gran amor, hazlas con un poco de amor. Si no puedes hacerlas con un poco amor, hazlas de cualquier modo. El amor crece cuando servimos a nuestro semejante.” John Ortberg Jr. en su libro “El “Yo” que Quiero Ser: La Mejor Versión de Dios para Mí”
El amor ni siempre se siente, pero aún así debe ser ejercitado siguiendo las enseñanzas de Jesús. Después de servir nuestro semejante nos llenamos del amor verdadero, del amor que viene del Padre. Este servicio puede tomar muchas formas: dar de comer a un hambriento, visitar a un enfermo, ayudar a un anciano, pero también puede tomar la forma tan sencilla de sonreír a un vecino o saludar a un extraño. No se sabe lo que pasa con cada persona, puede que lo que necesite en este día es una sonrisa.
Termino con otras palabras de Madre Teresa:
“No sé exactamente como será el cielo, pero sé que cuando sea que muramos y venga el momento en que Dios nos juzgue, no preguntará, “¿Cuántas buenas acciones has hecho en tu vida?, al envés preguntará, “¿Cuanto amor has puesto en lo que has hecho?”
Recomiendo la siguiente lectura de la Biblia:
1 Corintios 13:1-3
El amor
1 Si yo hablara lenguas humanas o angélicas, pero no tengo amor, seré como una campana que suena o un platillo que retiñe.
2 Si profetizara, y conociera todo lo que está oculto, y entendiera todas las cosas; y si fuera tanta mi fe que pudiera trasladar montañas, pero no tengo amor, no soy nada.
3 Si diera a los pobres hasta el último de mis bienes terrenales, y aun si entregara mi cuerpo para que me quemasen vivo, pero no tengo amor, de nada me sirve.
2 comentarios:
Me ha encantado esta entrada. Si todo el mundo funcionara con un poco más de humanidad en nuestros actos, quizás sería diferente la relación entre las personas. Nos estamos convirtiendo en seres egoístas que sólo pensamos en los beneficios que podemos sacar de otros sin pararnos a pensar si estamos haciendo daño o no. Solemos pensar que el fín, justifica los medios, aunque sea hundiendo al que tenemos al lado.
Estoy totalmente de acuerdo con lo que decía la Madre Teresa, y tal vez, sólo con una sonrisa, podemos hacer feliz a alguien. A veces, no se necesita nada más.
Me hago seguidora y volveré a visitarte.
Un saludo
Gracias ... juntas en esta labor de amar, lo sintamos o no, con nuestras acciones. Besitos. Mara
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